Antes de la segunda catástrofe Transapalniana, que alteró fundamentalmente el aspecto de la corteza terrestre, existió un viejo continente que hoy yace sumergido entre las procelosas aguas del Océano Atlántico.
Quiero referirme en forma enfática a la “Atlántida”, sobre la cual existe por doquiera innumerables tradiciones.
Ved, si no, nombres extranjeros Atlantes o de lenguas bárbaras, como solían decir aquellos cretinos Griegos que quisieron asesinar a ANAXÁGORAS cuando se atrevió a decir que el sol era un poco más grande que la mitad del Peloponeso.
Nombres, digo, traducidos al Egipcio por los sacerdotes saíficos, y vueltos a su significación primera por el Divino Platón, para verterlos después maravillosamente al lenguaje de Ática.
Ved el hilo diamantino de la tradición milenaria desde aquellos a Solón, continuándose luego con los dos Cristias y el Maestro Platón…
Ved, os digo, extraordinarias descripciones de Botánica, Geografía, Zoología, Mineralogía, Política, Religión, costumbres, etc., de los Atlantes.
Ved también con ojos de águila rebelde, veladas alusiones a los primeros Reyes Divinos de aquel viejo continente antediluviano, a los que tantas referencias tienen asimismo el Paganismo Mediterráneo y los textos sagrados antiquísimos del mundo oriental.
Reyes sublimes de los que esto otros apuntes asombrosos de Diodoro Sículo, que aún nos quedan por estudiar, dan detallada cuenta.
Ved, en fin, y esto es lo más interesante, el mismo sacrificio de la Vaca Sagrada, característico de los Brahamnes, los Hebreos, los Mahometanos, los Gentiles Europeos y millares de otros pueblos.
Es incuestionable que nuestro celebérrimo e indestructible Circo Taurino, en el fondo no es sino una supervivencia ancestral antiquísima de aquella fiesta de sacrificio Atlante, cuya descripción se encuentra todavía en muchos libros arcaicos secretos.
Son en realidad muchas las leyendas existentes en el mundo, sobre aquellos toros sueltos en el Templo de Neptuno, animales a los que no se les rendía brutalmente como hoy, con picos y espadas, sino con lazos y otras artes ingeniosas de Clásica Tauromaquia.
Vencida ya en el ruedo sacro la simbólica bestia, era inmolada en honor de los Dioses Santos de la Atlántida, quienes, cual el propio Neptuno, habían involucionado desde el estado solar primitivo, hasta convertirse en gentes de tipo lunar.
El Clásico Arte Taurómaco, es ciertamente algo iniciático y relacionado con el culto misterioso de la Vaca Sagrada…
Ved, el ruedo Atlante del templo de Neptuno, y el actual, ciertamente no son sino un zodíaco viviente, en el que constelado se sienta el honorable público.
El Iniciador o Hierofante es el maestro, los banderilleros de a pie, son los compañeros. Los picadores, a su vez los aprendices. Por ello estos últimos van sobre el caballo, es decir, con todo el lastre encima de su indomado cuerpo, que suele caer muerto en la dura brega.
Los compañeros, al poner las banderillas o bastos, ya empiezan a sentirse superiores a la fiera, al ego animal; es decir, que son ya, a manera del Arjuna del Baghavad Gita, los perseguidores del enemigo secreto, mientras el Maestro con la capa de su jerarquía, o sea con el dominio de MAYA y empuñando con su diestra la espada flamígera de la voluntad, resulta a la manera del Dios Krishna de aquel viejo poema, no el perseguidor, sino el matador del YO, de la bestia, horripilante monstruo bramador que también viese en el KAMELOC o KAMALOKA el propio Rey Arthur, jefe supremo de los insignes Caballeros de la Mesa Redonda.
Es pues, la resplandeciente Tauromaquia Atlante, un arte regio, profundamente significativo, por cuanto nos enseña a través de su brillante simbolismo, la dura brega que debe conducirnos hasta la disolución del YO.
Cualquier vistazo retrospectivo, relacionado con el Esoterismo Taurino, es indubitable que puede conducirnos a místicos descubrimientos de orden trascendental.
Como hecho de actualidad inmediata no está demás citar el profundo amor que siente el torero por su Virgen; es ostensible que a ella se entrega totalmente antes de aparecer con su traje de luces en el ruedo. Esto viene a recordarnos los Misterios Isíacos, el sacrificio terrible de la Vaca Sagrada y los cultos arcaicos de IO, cuyos orígenes devienen solemnes desde el amanecer de la vida en nuestro planeta Tierra.
Resulta patético, claro y definido, que sólo IO, Devi Kundalini, la Vaca Sagrada de las Cinco Patas, la Madre Divina, posee en verdad ese Poder Mágico Serpentino que nos permite reducir a polvareda cósmica al Ego Animal, la bestia bramadora del ruedo de la existencia.
Las vocales IO constituyen en sí mismas el número DIEZ de la generación y la razón de la circunferencia al diámetro.
Obviamente IO es pues el número Pi (Pithar), el tremendo misterio masculino-femenino.
IO, también es la Swática, foat o la electricidad sexual trascendente que se representan con la cruz dentro del círculo y símbolo de la Tierra sobre cuyo tema podría escribirse todo un libro.
Escrito está con letras de fuego en el libro de la vida, que tal símbolo de la Swástica, en forma de coordinadora matemática, ha existido en todos los países de la Tierra desde la noche de los siglos.
Necesitamos con suma urgencia, inaplazable, convertirnos en “Boyeros”, es decir, en sabios conductores de la “Vaca Sagrada”.
La Venerable Gran Maestra H.P.B., vio realmente, en el Indostán, a una auténtica vaca de cinco patas; era un verdadero capricho de la naturaleza, un milagro inmaculado, blanquísimo, inefable…
Don Mario Roso de Luna dijo que aquella singular criatura llevaba la quinta pata en la jiva; y que con ésta espantaba las moscas o se rascaba…
El curioso animal era conducido por un joven de la secta Sadhú; el doncel se alimentaba exclusivamente con la leche de esta misteriosa vaca.
Resalta palmario y manifiesto el simbolismo esotérico, maravilloso y esplendente de la “Vaca de las Cinco Patas”.
Vivísima expresión manifiesta de los cinco desdoblamientos de nuestra Divina Madre KUNDALINI, muy particular…
Recordemos el signo del infinito, el ocho tendido horizontalmente e igualado a un cinco, lo que da, leído literalmente: “Infinito igual a Cinco”; es decir, el infinito igual a la pentalfa, a la Vaca Inefable de las Cinco Patas, a la estrella de las cinco puntas o pentágono regular estrellado, que detuvo a MEFISTÓFELES cuando acudió a la evocación brujesca del Doctor Fausto…
Definir estos cinco aspectos es indispensable para bien de todos y de cada uno de nuestros estudiantes:
- 1 – La inmanifestada KUNDALINI.
- 2 – ISIS inefable, Casta Diana. (Sabiduría, Amor, Poder).
- 3 – LA HEKATE Griega, la PROSERPINA Egipcia, la COATLICUE Azteca. (La Reina de los Infiernos y la Muerte. Terror de amor y Ley).
- 4 – LA MADRE NATURA PARTICULAR INDIVIDUAL. (Aquella que creó nuestro cuerpo físico).
- 5 – La Maga Elemental Instintiva. (Aquella que originó nuestros instintos).
EL “BOYERO”, el conductor de la “Vaca Sagrada”, puede y debe trabajar en el Magisterio de estos cinco poderes de la Pentalfa…
Solemnemente declaro, enfáticamente, lo siguiente: Yo trabajo directamente con los cinco poderes de la Vaca Sagrada.
Ilustrar, aclarar, enseñar sobre la Pentalfa, es un deber, pero prefiero hacerlo con relatos vividos:
PRIMER RELATO
Dicen que entre lo sublime y lo ridículo no hay más que un paso y esto es axiomático.
Recordad por un momento a las Bacantes cuando estaban en el período de su furor orgiástico.
Bellezas femeninas polarizadas positivamente con la Onda Dionisíaca, Ninfas de los bosques y de las montañas perseguidas por los Silenos lascivos…
Ved ahora a las Ménades ridículas, negativamente polarizadas con la Onda de Dionisio…
Bailarinas desenfrenadas en el furor de su locura sagrada. Mujeres “HIPPIES” de la antigua Grecia.
Féminas prostitutas excitadas por las drogas, en plena embriaguez Dionisíaca… Los sacrificios humanos y de animales, las hacían aún más peligrosas…
Fueron las Ménades lujuriosas quienes dieron muerte a Orfeo y la lira maravillosa cayo sobre el pavimento del templo hecha pedazos… Alguna vez relataba a mis amigos, cómicos episodios, relacionados con un pasado bohemio…
Obviamente no podía faltar en tal comicidad el fruto fermentado de la vid y las Bacantes en el colmo de su furor orgíaco…
Ridículas escenas de aquellos tiempos idos en que yo anduve por el mundo éste del KALI-YUGA, como BODDHISATTWA caído…
Empero, existen momentos estelares de la humanidad; un recordatorio cósmico suele en verdad ser muy necesario…
Fuera del vehículo físico, en cuerpo ASTRAL, bajo la zona tridimensional de Euclides, hube de entrar en el mundo soterrado… Lo que sucedió luego fue espantoso en gran manera; lo que allí vi en la horrible región sumergida, fue lo mismo que antes vieran los Hoffman, los Edgard Poe, los Blavatsky, los Bulwer-Litton de todos los tiempos; lo mismo que nos pintase Espronceda con sus coros Demoníacos, con las angustias del poeta, con sus voces discordes de los que llevan sin rumbo la nave de la vida, fiándose locos del viento de las pasiones y de la tenebrosa mar de la duda en el bien obrar; de los que fatales se desposan con el destino; de los que orgullosos quieren alzar Torres de Babel de ambiciones necias; de los que mienten, de los que combaten por mundanales glorias, de los que se enlodan en el placer de la orgía, de los que codician el oro, de los ociosos que odian el trabajo fecundo y creador, de los malvados, de los hipócritas y demás víctimas del Proteo del egoísmo, en fin…
Aparecieron garras, dientes, cuernos, trompas, dardos, labros, colas, alas aserradas, dilacerantes anillos que amenazaban aniquilarme cual a ínfimo gusano…
A mis oídos mágicos llegaron en esos momentos muchos sonidos horripilantes: baladros, aullidos, silbos, relinchos, chirridos, mugidos, graznidos, maullidos, ladridos, bufares, roncares y crocotares.
Sumergido me hallé entre el lodo de tanta miseria; la angustia se apoderó de mi; aguardaba ansiosamente un bálsamo para sanar mi adolorido corazón…
No eran vanas, no, las lucubraciones de esos grandes videntes de lo astral que se llamaron Alquimistas, Kabalistas, Ocultistas, Esoteristas, Yoguis, Gnósticos o simplemente poetas.
De pronto, algo insólito sucede más allá de las cenagosas aguas del Aqueronte; gira sobre sus goznes de acero la horrible puerta que da acceso a la Morada de Plutón…
Intensamente emocionado me estremezco, presiento que algo terrible ha sucedido. No estoy equivocado… La veo, es ella, la INMANIFESTADA KUNDALINI; ha traspasado el umbral donde moran las almas perdidas…
Magnífica Madona, excelente, extraordinaria y terriblemente Divina; se acerca a mi con paso magistral; no se que hacer, estoy confundido, siento temor y amor simultáneamente…
¿Recordatorio Cósmico? ¿Recriminación? Habla la adorable con voz de paraíso, me bendice y luego continúa su camino como quien va hacia las espantosas murallas de la ciudad de DITE.
En el fondo de mi conciencia sentí en esos momentos como si ella quisiera también ayudar a otros que moran en torno a la ciudad del dolor, donde ya no podremos entrar sin justa indignación…
Mirando desde la alta torre de ardiente cúspide, cuentan que vio al Dante aparecer de improviso las tres Furias Infernales, las cuales según se dice, tenían movimientos y miembros femeniles…
Todo esto lo recordé instantáneamente; en modo alguno quería yo -mísero mortal del lodo de la tierra -, convertirme en un habitante más de la ciudad del dolor.
Afortunadamente tuve la inmensa dicha de poder salir de entre las entrañas del Averno para aparecer a la luz del Sol…
OTRO DIA: Muy de mañana alguien toca a mi puerta; es un viejo Profesor de Enseñanza Secundaria…
Aquel buen señor me invita a una fiesta de graduación; su hija ha concluido estudios con pleno éxito…
¡Imposible declinar su invitación! Es mi amigo y hasta le debo ciertos servicios. En modo alguno estoy dispuesto a despreciarlo…
Después de todos los consabidos arreglos personales, LITELANTES y mi insignificante persona, que nada vale, salimos de casa con el ánimo de llegar hasta la morada del profesor.
Muchas gentes elegantemente vestidas nos recibieron muy cordiales en la regia mansión…
Música deliciosa resonaba en al estancia; gentes alegres iban y venían por aquí, por allá y acullá; dichosas parejas danzaban sobre la mullida alfombra.
Varias veces mi espléndido anfitrión vino hasta nosotros con el propósito de brindarnos el fermentado vino…
Yo vi una y otra vez muy de cerca las resplandecientes copas de fino bacará; empero, rechacé enérgicamente a BACO y sus orgías. Me hallaba compungido de corazón… mi anfitrión se tornó cáustico, incisivo y hasta un poco hiriente.
Incuestionablemente se convirtió en mi peor enemigo, supuso equivocadamente que yo hacía un desaire a su fiesta…
Más tarde propagó contra mi diversos infundios difamantes; lanzó contra mi insignificante persona todo el veneno de sus críticas… No contento con todo eso, apeló a la calumnia pública, acusándome ante los tribunales de justicia por supuestos delitos que todavía ignoro…
Aquel caballero de marras murió un poco más tarde en un desgraciado accidente automovilístico.
Hoy en día pienso que en aquel festín procedí ciertamente como cualquier intonso, me faltó diplomacia.
Existen convidados en todas las salas del mundo, que saben jugar con el Diablo; se pasan la noche entera con una copa en la mano y se defienden maravillosamente.
Simulan beber cada vez que hay un nuevo brindis, más en realidad no beben, se burlan del Demonio del Alcohol…
SEGUNDO RELATO
Vamos ahora a un nuevo relato muy singular, en el cual no hablaremos de festines maravillosos ni de banquetes a lo Heliogábalo… “¡Qué descansada vida la del que huye del mundanal ruido y sigue la escondida senda por donde han ido los pocos sabios que en el mundo han sido!
“Que no le enturbia el pecho de los soberbios grandes el estado, ni del dorado techo se admira, fabricado del sabio moro, en jaspes sustentado!…”
Venus cazadora descendiendo de las altas cumbres con el propósito de auxiliar a su hijo ENEAS, el héroe troyano que ha desembarcado en la tierra de Libia; me trae recuerdos insólitos…
ISIS, ADONIA, TONANZIN, (el segundo aspecto de mi Madre Divina KUNDALINI), vino a mi más veloz que el soplo del Euro… No tenía el rostro propio de un mortal, poseía una belleza imposible de definir con palabras, parecía hermana de FEBO APOLO… Me vi entre sus amantísimos brazos inmaculados; parecía la adorable una dolorosa como aquella del bíblico evangelio crístico… Tenía hambre y me dio de comer, sed y me dio de beber, enfermé y me curó. Imposible olvidar sus palabras:
“Hijo mío, tú, sin mí, en la hora de la muerte estaríais completamente huérfano”.
Luego continuó diciendo: “Tú, sin mí, estaríais en el mundo totalmente solo”. “¿Qué sería de tu vida sin mí?”.
Posteriormente repetí: “Ciertamente, sin ti, Madre mía, yo estaría huérfano”.
Reconozco plenamente que sin tu presencia, en la hora de la muerte me hallaría realmente solo.
La vida se torna en un desierto cuando uno ha muerto en sí mismo; sin el auxilio de nuestra Divina Madre KUNDALINI en toda la presencia de nuestro ser, nos encontraríamos entonces interiormente huérfanos…
¡Oh Madre adorable! Tú has manifestado el Prana, la electricidad, la fuerza, el magnetismo, la cohesión y la gravitación en este universo.
Tú eres la Divina Energía Cósmica Oculta entre las ignotas profundidades de cada criatura.
¡Oh Maha Saraswati! ¡Oh Maha Lakshmi! Tú eres la esposa inefable de SHIVA. (El Espíritu Santo).
TERCER RELATO
La leyenda de la Vaca Celeste, cuya leche es ambrosía, vida e inmortalidad, no es, en modo alguno, algo sin basamentos sólidos, y nosotros los adeptos, como el Divino Gauthama o el Buddha conductor de la Vaca, trabajamos muy seriamente con el Magisterio de los Cinco Aspectos de DEVI-KUNDALINI.
A los Gnósticos nos place en gran manera alimentarnos con las manzanas de Oro o de Freya, que dan la inmortalidad a los Dioses…
Bebemos, dichosos, el licor del soma o Bíblico Maná, con el cual nos sentimos tan reconfortados y vigorosos como en los mejores momentos de nuestras floridas juventudes…
Cierto evento cósmico trascendental, divinal, adviene a mi memoria en instantes en que escribo estas líneas.
Sucedió hace ya muchos años, que en una noche de plenilunio fui transportado a un monasterio extraordinario de la Fraternidad Universal Blanca…
¡Cuán feliz me sentí en la mansión del amor!… Ciertamente no hay mayor placer que aquel de sentirse el alma desprendida… en esos instantes el tiempo no existe y el pasado y el futuro se hermanan dentro de un eterno ahora.
Siguiendo a mis amigos por regias cámaras y galerías, llegamos hasta un patio fresquísimo, del que era una miniatura el de Los leones de la Alhambra.
Encantador patio en el que murmuraban, entre flores nunca vista ni oídas, varios surtidores de aguas como aquellas de la Divina Fuente Castalia…
Empero, lo mejor lucía en el centro del patio y lo contemplé con místico asombro de penitente y anacoreta…
Quiero referirme en forma enfática a la “PIEDRA DE LA VERDAD”. Esta tenía entonces humana forma divinal…
Prodigio Sexual de la bendita Diosa Madre Muerte; maravilla funeral, espectral…
Tercer aspecto de mi Divina Madre KUNDALINI, pétrea escultura viviente, tremenda representación de eso que tanto asusta a los mortales…
Sin ambages, confieso ante los Divinos y ante los humanos, que yo abracé a la terrible Diosa Muerte en plena embriaguez dionisíaca…
Era indispensable reconciliarme con la ley; así me lo habían dicho los Hermanos de la Orden de San Juan, esos Venerables que en sí mismos habían realizado ya el Misterio Hiperbóreo…
Concluido aquel festival cósmico, hube entonces de reunirme con algunas Damas y Caballeros del Santo Grial en el refectorio del Monasterio…
Con mucho secreto y gran entusiasmo, todos los hermanos comentamos durante la cena el extraordinario acontecimiento…
Incuestionablemente las “Piedras Animadas” que en la antigua Arcadia modificaron radicalmente la forma de pensar del sabio pausanias, pueden ser clasificadas en dos clases: OPHITES y SIDERITES, la “Piedra-Serpiente” y la “Piedra-Estrella”.
Eusebio, especialmente, nunca se separaba de sus Ophites que llevaba en su seno, y recibía oráculos de ellas, proferidos por una vocecita que se parecía a un tenue silbido…
Arnobio cuenta que siempre que encontraba una piedra de estas, no dejaba de dirigirle alguna pregunta que ella contestaba con una vocecita clara y aguda…
HEKATE, PROSERPINA, COATLICUE, en viviente piedra animada, parecióme como si hubiese brotado del “Campo de la Madre” o de alguna tumba de Carnac.
CUARTO RELATO
“Lo que el común de las gentes conoce actualmente acerca del Shamanismo es muy poco, y aún este poco ha sido adulterado, lo mismo que el resto de las religiones no cristianas”.
“Suele llamársele “el paganismo de la Mongolia” sin razón alguna, puesto que es una de las más antiguas religiones de la India, a saber: el culto del espíritu, la creencia en la inmortalidad de las almas y en que éstas, allende la muerte, siguen presentando las mismas características de los hombres a quienes animaron aquí en la Tierra, aunque sus cuerpos hayan perdido, por la muerte, su forma objetiva, cambiando el hombre su forma física por la espiritual”. “Dicha creencia en su forma actual, es un retoño de la primitiva Teurgia y una fusión práctica del mundo visible con el invisible”.
“Cuando un extranjero naturalizado en el país desea entrar en comunicación con sus invisibles hermanos, tiene que asimilarse su naturaleza, esto es, debe encontrar a estos seres andando la mitad del camino que de ellos les separa, y enriquecido entonces por ellos con una abundante provisión de esencia espiritual, dótales él, a su vez, con una parte de su naturaleza física, para colocarles de esta suerte en condiciones de poderse mostrar algunas veces en su forma semi-objetiva, de la que de ordinario carecen”.
“Semejante proceso es un cambio temporal de naturalezas, llamado comúnmente Teurgia”.
“La gente vulgar llama hechiceros a los Shamanos, porque se dice que evocan a los espíritus de los muertos con el fin de ejercer la nigromancia, pero el verdadero Shamanismo no puede ser juzgado por sus degeneradas ramificaciones en Siberia, del mismo modo que la religión de Gautama-Buddha no puede ser confundida con el fetichismo de algunos que se dicen sus secuaces, en Siam y Brimania”.
Incuestionablemente las teúrgicas invocaciones devienen más sencillas y eficaces, cuando se opera mágicamente con el cuerpo físico totalmente sumergido dentro de la cuarta dimensión.
Si recorriendo hacia adentro y hacia arriba la mitad del camino que de los seres queridos nos separa, podemos encontrarnos con nuestros muertos queridos cara a cara, obviamente resultaría más fácil todo esto andando la totalidad del camino.
Con el cuerpo físico sumergido dentro de la cuarta coordenada, podemos como Jámblico invocar a los Dioses Santos para platicar con ellos personalmente.
Empero, es ostensible que necesitamos con urgencia máxima un punto de apoyo, una palanca, que nos permita realmente saltar con cuerpo físico y todo a la cuarta dimensión.
Cabe oportunamente citar aquí, aquella famosa frase de Arquímedes: “Dadme un punto de apoyo y moveré el Universo”.
Ya en el octavo capítulo de este libro hablamos con mucho énfasis sobre el agente mágico de los estados “Jinas”, quiero referirme claramente al cuarto aspecto de DEVI-KUNDALINI. (ESTE ES EL PUNTO DE APOYO PARA LA CUARTA VERTICAL).
En instantes en que escribo estas líneas, vienen a mi mente algunas remembranzas, magníficas evocaciones divinales…
Sucedió que en una noche otoñal resolví beber del vino de la meditación en la copa de la perfecta concentración.
El motivo de mi meditación fue “Mi Madre Natura Particular”, el cuarto aspecto de la Serpiente Ígnea de nuestros mágicos poderes. Orar es platicar con Dios y yo platique con la adorable, suplicándole con el verbo silencioso me llevase con cuerpo físico al Paraíso Terrenal. (La Cuarta Dimensión).
Lo que luego acaeció en la noche del misterio fue asombroso: asistido por la inefable me levanté del lecho…
Cuando abandoné mi morada y salí a la calle, pude evidenciar que mi cuerpo físico había penetrado en la cuarta dimensión…
Ella me llevó a los bosques más profundos del Edem, donde los ríos de agua pura de vida manan leche y miel…
¡Virgen, Señora de arboladas cumbres! Todo calla ante ti: La Iberia inculta, el galo que aún muriendo, adusto reta, y el Sicambro feroz, que al fin rindiendo las armas humillado te respeta.
Adorable Madona mía, por los Dioses que desde alto cielo gobiernan en la tierra a los mortales, imploro siempre tu auxilio…
El rostro de mi Madre Natura era como el de una beldad paradisíaca, imposible de describir con humanas palabras… Su cabello parecía como una cascada de oro cayendo deliciosamente sobre sus hombros alabastrinos…
Su cuerpo era como el de la Venus Mitológicas; sus manos con dedos cónicos hermosísimos y llenos de gemas preciosas, tenían la forma crística…
En el bosque platique con la adorable y ella me dijo cosas que a los seres terrenales no les es dable comprender…
Sublime resplandecía Mi Madre en el mundo etérico, en la cuarta vertical, en la cuarta dimensión…
Si, pues, nada produce alivio para el pecho doliente, ni mármoles de Frigia, ni púrpura esplendente, mejor es que se refugie entre el seno delicioso de su Divina Madre Natura particular, individual… Ella es la autora de nuestros días, la verdadera artífice de nuestro cuerpo físico…
Fue ella la que en el laboratorio humano juntó al óvulo con el zoospermo para que surgiera la vida…
Es ella la creadora de la célula germinal con sus cuarenta y ocho cromosomas…
Sin ella no se hubieran multiplicado las células del embrión, ni formado los órganos…
Aunque doblegue tu alma el sufrimiento, tente firme ¡Oh Discípulo! Y entrégate humildemente a tu Madre Natura…
QUINTO RELATO
“Quiero ver en los confines de la terrestre mansión, al Océano y a Thetis, a quienes debemos la existencia”.
Los amores de Júpiter con la Virgen IO, la cual fue transformada en ternera celeste o Vaca Sagrada de los orientales, para así escapar a las iras de JUNO, es algo que tiene muy honda significación…
De aquí, pues, el primer Júpiter de la Teogonía Griega, Padre de todos los Dioses, Señor del Universo y hermano de URANO o UR-ANAS, es decir, el Fuego y el Agua Primitivos; pues es sabido, según el clásico, que en el Panteón Griego figuran cerca de trescientos Júpiteres.
En su otro aspecto de JOVE o IOD-EVE, es el JEHOVAH macho-hembra, andróginos colectivos de ELOHIM de los Libros Mosaicos, ADAM-KADMON de los Kabalistas, el IA-CHO o INACHO de la Anatolia que también es el Dionisios, cuya onda vibratoria se ha vuelto muy intensa con la entrada del Sol en la brillante constelación de Acuario…
Jesús, el Gran Kabir, jamás le rindió culto al antropomórfico JEHOVÁ de las muchedumbres judías…
A la Ley del Talión: “Ojo por Ojo y Diente por Diente” del JEHOVÁ vengativo, le siguió la Ley del Amor: “Amaos los unos a los otros como yo os he amado”.
Si con místico entusiasmo escudriñamos las Sagradas Escrituras, podremos evidenciar claramente el hecho palmario y manifiesto, de que en ninguno de los cuatro evangelios figura el antropomórfico Jehová Hebraico.
RAM-IO, (MARIA), la DIVINA MADRE KUNDALINI, acompañó siempre al adorable y ahí la vemos en el Monte de las Calaveras al pie de la cruz…
“Padre mío, perdónalos porque no saben lo que hacen”, exclama el Divino Rabí de Galilea desde las cumbres majestuosas del Calvario. Incuestionablemente el bendito Señor de Perfecciones sólo adoró a su Padre que está en secreto y a su Divina Madre KUNDALINI.
En otras palabras diremos: El Gran KABIR Jesús amo profundamente a IOD-HEVE, el Divino MACHO-HEMBRA interior…
IOD, es ciertamente la Monada particular, individual, de cada cual, el SHIVA Indostán, el Archihierofante y Archimago, el primogénito de la creación, el Vellocino de Oro, el tesoro del cual debemos apoderarnos después de vencer al Dragón de las Tinieblas…
HEVE, es el desdoblamiento de IOD, la Divina Esposa de SHIVA, nuestra Madre KUNDALINI individual, la Vaca
Sagrada de las cinco patas, el misterio esotérico de la Pentalfa.
Júpiter y su Vaca de IO (iiiii ooooo), guarda concomitancia exacta con el IOD-HEVE, la Divina Pareja Divinal interior de cada criatura.
Cuatro aspectos de la Vaca Sagrada de IO hemos estudiado; continuemos ahora con el Quinto Misterio…
Existen en el camino esotérico intervalos cósmicos trascendentes y trascendentales.
Después de haber ingresado al templo de los dos veces nacidos, hube de pasar por uno de esos intervalos…
Quiero referirme en forma enfática a un suspenso sexual; a un período de abstención que duró varios años.
En el ínterin me dediqué con exclusividad absoluta a la meditación interior profunda…
Objetivo, disolver el YO Psicológico, el Mí Mismo, el Sí Mismo, el cual es ciertamente un nudo en la energía cósmica, una trabazón que debemos reducir a polvareda cósmica.
Comprender en forma íntegra cada uno de mis defectos psicológicos, me pareció fundamental, más yo quise ir un poco más lejos por el camino de la meditación.
Comprensión no es todo. Necesitamos con urgencia máxima, inaplazable, capturar la honda significación de aquello que hemos comprendido.
Cualquier devoto del real camino puede haberse dado el lujo de comprender un defecto psicológico en todos los territorios de la mente, sin que por ello haya logrado la aprehensión de su hondo significado. Tratando de comprender mis propios defectos en todos los recovecos de la mente, resolví convertirme en enemigo de mí mismo.
Cada defecto fue estudiado por separado y en forma muy ordenada; jamás cometí el error de querer cazar diez liebres al mismo tiempo, de ninguna manera quería exponerme a un fracaso.
La meditación se hacía exhaustiva, se tornaba cada vez más profunda y cuando me sentía desfallecer, dejaba la mente quieta y en silencio como aguardando alguna revelación; en esos instantes venía la verdad, capturaba eso que no es del tiempo, el hondo significado del defecto comprendido en forma íntegra.
Después oraba, suplicaba, rogaba con vehemencia a mi Divina Madre KUNDALINI, eliminara de mi mente el agregado psíquico, el defecto psicológico en cuestión.
Así, poco a poco, con esta didáctica, con este “Modus Operandí”, logré durante aquella pausa sexual, eliminar un cincuenta por ciento de esos elementos subjetivos, infrahumanos, que llevamos dentro y que constituyen el EGO, el YO.
Empero, es evidente que todo en la vida tiene un límite. Hay escalas y escalas, grados y grados.
Este trabajo se hizo espantosamente difícil cuando hube de enfrentarme a los elementos infrahumanos más antiguos.
Incuestionablemente mi Madre Divina necesitaba de armas superiores; me acordé de la lanza de Eros, el emblema maravilloso de la sexualidad trascendental, pero me hallaba en una pausa. ¿Qué hacer?.
Sin embargo ya se me había entregado un desiderato cósmico y cierto imperativo categórico me exigía descender otra vez a la “Fragua Encendida del Vulcano”. (el sexo), más yo no había comprendido. Había sido transportado a las montañas del misterio, había visto en acción las terribles fuerzas del Gran Arcano.
En vano luché contra el imperativo categórico de las Ondas Dionisíacas; eran ciertamente espantosamente divinas, omnipotentes…
Esos poderes sobrenaturales parecían una hecatombe Apocalíptica; sentí como si tales fuerzas pudiesen hacer saltar la Tierra en pedazos.
Cuando quise buscar, indagar, inquirir, sobre el origen de tales fuerzas y poderes sexuales, me encontré frente a frente con la Maga Elemental, con mi Divina Madre KUNDALINI en su Quinto Aspecto.
Ciertamente la había visto bellísima, del tamaño de un Gnomo o Pigmeo, muy pequeña…
Ella vestía con blanca túnica y larga capa negra que arrastraba por el suelo; su cabeza estaba cubierta con un tocado mágico muy especial.
Junto a una de las dos columnas simbólicas de la Masonería Oculta, la adorable me había ordenado un nuevo descenso a la “Novena Esfera”. (el Sexo).
Desgraciadamente yo había creído que se trataba de alguna prueba y por ello continuaba en desobediencia: ciertamente estaba lerdo en la comprensión y esto me estaba estancando.
Pasado algún tiempo de mortales luchas contra cierto agregado psíquico muy infrahumano que se resistía violento a desaparecer, hube de apelar a la Lanza de Longibus.
No me quedaba otra solución. Apelé a la electricidad sexual trascendente; supliqué a mi Divina Madre Kundalini durante la cópula metafísica, le rogué ansioso que empuñara la Lanza de Eros. El resultado fue extraordinario. Mi Madre Sagrada armada entonces con la Pica Santa, con el Asta Divina, con el poder eléctrico-sexual, pudo reducir a polvo cósmico al monstruo horripilante, al agregado psíquico que en vano había intentado disolver lejos del coito químico.
Así fue como abandoné mi pausa sexual y volví a la “Forja de los Cíclopes”. Trabajando con el Asta Santa conseguí reducir a polvareda cósmica a todos los elementos infrahumanos que constituyen el YO.
El Quinto Aspecto de DEVI KUNDALINI nos da la potencia sexual, la fuerza natural instintiva, etc., etc., etc.
Samael Aun Weor