- “Combatiremos con el objeto que los niños menores de 16 años o jóvenes no trabajen, y reciban educación por el Estado hasta la enseñanza segundaria obligatoria, cumplida la mencionada edad, podrán trabajar con el consentimiento de sus padres, en caso de que no tengan ninguno de ellos con el consentimiento del tutor que nombren, con un horario de cuatro horas en el turno diurno; tres horas turno de noche y tres horas y media en el turno mixto, procurando que trabajen en los que aspiren aprender, pues así al llegar a la mayor edad, contarán con un oficio. Con las horas de trabajo mencionado los menores de ambos sexos puedan dedicarse a estudiar lo que desean. Los patrones que no cumplan con lo expuesto deberá aplicárseles una sanción fuerte de multa, por primera vez y los posteriores hasta con cárcel, los salarios se regularán en los términos mencionados en los puntos 17 y 18, para que vivan honestamente”. (ALEJANDRO SALAS LINARES)
Este asunto de los menores de edad es muy problemático. Por estos tiempos muchos menores de edad tienen que trabajar para ganarse la vida o para sostener a sus padres en la miseria o a sus hermanitos pequeños.
Justo es que los menores de 16 años no trabajen pero hay casos en que les es indispensable trabajar, sobre todo cuando tienen el padre anciano o la madre enferma y en la miseria.
Estos complejos casos deben ser estudiados a fondo por los Gobiernos y poner orden, reglamento, ley, para que estos menores NO SEAN VILMENTE EXPLOTADOS.
Es justo, es indispensable que los menores de edad reciban educación primaria y secundaria obligatoria.
El trabajo para los menores debe reglamentarse en tal forma que les quede tiempo libre para el estudio.
Es claro que nosotros debemos luchar porque los menores de 16 anos no trabajen cuando no hay motivo fuerte para ello; sin embargo existen excepciones que deben ser tenidas en cuenta por la ley.
En los casos indispensables el menor debe tener una licencia especial extendida por él Gobierno, que le permita trabajar.
Es urgente que la ciencia médica examine a los menores de edad y les extienda un certificado a fin de saber si pueden realmente trabajar.
Sería absurdo a todas luces, que las autoridades permitieran el trabajo de los menores de edad en expendios de bebidas alcohólicas de consumo inmediato, cantinas, ventas de licor de toda especie, etc.
Es absurdo meter a los menores en trabajos subterráneos o submarinos, pues esta clase de trabajos son muy peligrosos para su salud.
De ninguna manera conviene enviar a los menores a trabajar en lugares insalubres y peligrosos, pues claro que sus organismos en proceso de desarrollo, fácilmente pueden enfermarse.
Es criminoso hacer trabajar a los menores en trabajos superiores a sus fuerzas y en todos aquellos trabajos que en una u otra forma retardan el desarrollo del cuerpo y de la mente de las personas que no han llegado a la mayoría de edad.
Es injusto hacer trabajar a los menores de edad, HORAS EXTRAS y DÍAS FERIADOS.
Los menores y los ancianos necesitan consideración especial, leyes que les protejan contra la explotación y la crueldad.
Hoy en día es tal la crueldad humana, que a muchos menores de edad hasta tienen que pagar con su propia sangre el derecho a tener un empleo; conocimos el caso de un menor que aunque débil de salud y muy delgado, tuvo que dejarse sacar sangre “DIZQUE” para el BANCO DE SANGRE, condición indispensable para tener el derecho a trabajar en cierto departamento de gobierno.
Nunca había habido tanta crueldad, no hay piedad para nadie, ya hasta el derecho a trabajar hay que pagarlo con sangre sin que la edad signifique nada para estos monstruos del imperialismo.
Samael Aun Weor