La yoga ha sido mal entendida en el mundo occidental.
La Maestra Helena Petronila Blavatsky autora de la Doctrina Secreta, fue Yoguina, y sin embargo después de haber enviudado del Conde Blavatsky, tuvo que casarse; Todo el mundo sabe que ella no vivió con el conde, sin embargo tuvo que casarse nuevamente.
Una gran Yoguina como ella no podía casarse por simple pasión carnal, además ella se casó con un venerable anciano. Así pues el motivo es más hondo, más esotérico. Realmente la maestra necesitó el matrimonio para su realización Cósmica. Con la yoga algo consiguió pero no todo. Un yogui sin la magia sexual es como un jardín sin agua. Ella logró el desarrollo total de las siete serpientes con la magia sexual. En las escuelas de yoga oriental se enseña secretamente la magia sexual. Desgraciadamente en el mundo occidental han aparecido falsos Yoguis que han dañado muchos hogares.
Estos falsos profetas enseñan que el sexo es vulgar y perverso, y creen que pueden saltarse los muros del Edem.
Estos falsos Yoguis han acabado con la felicidad de muchos hogares; creen que pueden entrar al Edem por puertas falsas; han hecho que muchas virtuosas esposas le hayan cogido asco y repugnancia al sexo; así es como estos personajes han acabado con la felicidad de muchos hogares, insultando así al Espíritu Santo.
Nosotros conocimos el caso de una discípula del mago negro Estrada, que se separó sexualmente de su marido por seguir las teorías de ese cínico demonio, naturalmente este hogar se dañó.
Samael Aun Weor