Quienes se han dedicado a viajar por todos los países del mundo con el propósito de estudiar en detalles a todas las razas humanas, han podido comprobar por sí mismos que la naturaleza de este pobre Animal Intelectual equivocadamente llamado hombre, es siempre la misma, ya sea en la vieja Europa o en el África cansada de tanta esclavitud, en la Tierra Sagrada de los Vedas o en las Indias Occidentales, en Austria o en la China.
Este hecho concreto, esta tremenda realidad que asombra a todo hombre estudioso, puede especialmente verificarse si el viajero visita escuelas, colegios y universidades.
Hemos llegado a la época de producción en serie. Ahora todo se produce en cinta sucesiva y en gran escala. Series de aviones, carros, mercancías de lujo, etc., etc., etc.
Aunque resulte un poco grotesco, es muy cierto que las escuelas industriales, universidades, etc. se han convertido también en fábricas intelectuales de producción en serie.
Por estos tiempos de producción en serie el único objetivo en la vida es encontrar seguridad económica.
La gente le tiene miedo a todo y busca seguridad.
El pensamiento independiente por estos tiempos de producción en serie, se hace casi imposible porque el moderno tipo de educación se basa en meras conveniencias.
“La Nueva Ola” vive muy conforme con esta mediocridad intelectual. Si alguien quiere ser diferente, distinto a los demás, todo el mundo lo descalifica, todo el mundo lo critica, se le hace el vacío, se le niega el trabajo, etc.
El deseo de conseguir el dinero para vivir y divertirse, la urgencia de alcanzar éxito en la vida, la búsqueda de seguridad económica, el deseo de comprar muchas cosas para presumir ante los demás, etc., le marcan el alto al pensamiento puro, natural y espontáneo.
Se ha podido comprobar totalmente que el miedo embota la mente y endurece el corazón.
Por estos tiempos de tanto miedo y búsqueda de seguridad, las gentes se esconden en sus cuevas, en sus madrigueras, en su rincón, en el lugar donde creen que pueden tener más seguridad, menos problemas y no quieren salir de allí, le tienen terror a la vida, miedo a las nuevas aventuras, a las nuevas experiencias, etc., etc., etc.
Toda esta tan CACAREADA educación moderna se basa en el miedo y la búsqueda de seguridad, la gente está espantada, le tiene miedo hasta a su propia sombra.
Las gentes le tienen terror a todo, temen salir de las viejas normas establecidas, ser distintos a las otras gentes, pensar en forma revolucionaria, romper con todos los prejuicios de la Sociedad Decadente, etc.
Afortunadamente viven en el mundo unos pocos sinceros y comprensivos, que de verdad desean examinar profundamente todos los problemas de la mente, pero en la gran mayoría de nosotros, ni siquiera existe el espíritu de Inconformidad y rebeldía.
Existen dos tipos de REBELDÍA que están ya debidamente clasificados. Primero: REBELDÍA PSICOLÓGICA VIOLENTA. Segundo: REBELDÍA PSICOLÓGICA PROFUNDA DE LA INTELIGENCIA.
El primer tipo de Rebeldía es Reaccionario, Conservador y Retardatario. El segundo tipo de Rebeldía es REVOLUCIONARIO.
En el primer tipo de Rebeldía Psicológica encontramos al REFORMADOR que remienda trajes viejos y repara muros de viejos edificios para que no se derrumben, es el tipo regresivo, el Revolucionario de sangre y aguardiente, el líder de los cuartelazos y golpes de Estados, el hombre de fusil al hombro, el Dictador que goza llevando al paredón a todos los que no acepten sus caprichos, sus teorías.
En el segundo tipo de Rebeldía Psicológica encontramos a Buddha, a Jesús, a Hermes, al transformador, al REBELDE INTELIGENTE, al INTUITIVO, a los GRANDES paladines de la REVOLUCIÓN DE LA CONCIENCIA, etc., etc., etc.
Aquellos que sólo se educan con el absurdo propósito de escalar magníficas posiciones dentro de la colmena burocrática, subir, trepar al tope de la escalera, hacerse sentir, etc., carecen de verdadera profundidad, son imbéciles por naturaleza, superficiales, huecos, ciento por ciento bribones.
Ya está comprobado hasta la saciedad que cuando en el ser humano no existe Verdadera Integración de pensamiento y sentimiento, aunque hayamos recibido una gran educación, la vida resulta incompleta, contradictoria, aburridora y atormentada por innumerables temores de todo tipo.
Fuera de toda duda y sin temor a equivocarnos, podemos afirmar enfáticamente que sin Educación Integral, la vida resulta dañosa, inútil y perjudicial.
El Animal Intelectual tiene un Ego Interno compuesto desgraciadamente por distintas entidades que se fortifican con la Educación Equivocada.
El Yo Pluralizado que cada uno de nosotros llevamos dentro, es la causa fundamental de todos nuestros complejos y contradicciones.
La Educación Fundamental debe enseñar a las nuevas generaciones nuestra Didáctica Psicológica para la Disolución del Yo.
Sólo Disolviéndose las varias Entidades que en su conjunto constituyen el Ego (Yo), podemos establecer en nosotros un Centro Permanente de Conciencia Individual, entonces seremos Íntegros.
Mientras exista dentro de cada uno de nosotros el Yo Pluralizado, no solamente nos amargaremos la vida a sí mismos sino que también se la amargaremos a los demás.
¿ De qué vale que estudiemos derecho y nos hagamos abogados, si perpetuamos los pleitos? ¿De qué vale acumular en nuestra Mente muchos conocimientos, si nosotros continuamos confundidos? ¿De qué sirven las habilidades técnicas e industriales si las usamos para la destrucción de nuestros semejantes?.
De nada sirve instruirnos, asistir a clases, estudiar, si en el proceso del diario vivir nos estamos destruyendo miserablemente los unos a los otros.
El objetivo de la educación no debe ser solamente producir cada año nuevos buscadores de empleos, nuevos tipos de bribones, nuevos patanes que ni siquiera saben respetar la Religión del prójimo, etc.
El verdadero objetivo de la Educación Fundamental debe ser crear Verdaderos Hombres y Mujeres Integrados y por lo tanto Conscientes e Inteligentes.
Desgraciadamente los maestros y maestras de escuelas, colegios y universidades, en todo piensan, menos en despertar la INTELIGENCIA INTEGRAL de los educados.
Cualquier persona puede codiciar y adquirir títulos, condecoraciones, diplomas y hasta volverse muy eficiente en el terreno mecanicista de la vida, pero esto no significa ser Inteligente.
La Inteligencia no puede ser jamás mero funcionalismo mecánico, la Inteligencia no puede ser el resultado de simple información libresca, la Inteligencia no es la capacidad para reaccionar automáticamente con palabras chispeantes ante cualquier reto.
La Inteligencia no es mera verbalización de la Memoria; la Inteligencia es la capacidad para recibir directamente la Esencia, lo Real, lo que Verdaderamente Es.
La Educación Fundamental es la ciencia que nos permite despertar esta capacidad en nosotros mismos y en los demás.
La Educación Fundamental ayuda a cada individuo a descubrir los Verdaderos Valores que surgen como resultado de la Investigación Profunda y de la Comprensión Integral de Sí Mismo.
Cuando no existe en nosotros Auto-Conocimiento, entonces la Auto-Expresión se convierte en Auto-Afirmación Egoísta y Destructiva.
La Educación Fundamental sólo se preocupa por despertar en cada individuo la capacidad para comprenderse a sí mismo en todos los terrenos de la Mente y no simplemente para entregarse la complacencia de la Auto-Expresión equivocada del Yo Pluralizado.
Samael Aun Weor