Nuestra posición es absolutamente independiente. La Revolución de la Dialéctica no tiene más armas que la Inteligencia ni más sistemas que el de la Sabiduría.
La nueva cultura será sintética y con las bases de la Revolución de la Dialéctica.
Esta obra es eminentemente práctica, esencialmente ética y profundamente dialéctica, filosófica y científica.
Si se ríen del libro, si nos critican, si nos insultan, qué importa a la ciencia y qué a nosotros. Puesto que el que ríe de lo que desconoce, está en camino de ser idiota.
Aquí va este tratado al campo de batalla como un león terrible, para desenmascarar a los traidores y desconcertar a los tiranos ante el veredicto solemne de la conciencia pública.