Ha mucho tiempo, en la noche profunda de los siglos, allá en el continente MU o LEMURIA, conocí a YAHVÉ, aquel ángel caído del cual habla Saturnino de Antioquia.
Ciertamente YAHVÉ era un venerable Maestro de la BLANCA HERMANDAD, un ÁNGEL GLORIOSO de precedentes MAHAMVANTARAS.
Le conocí, le vi, fue SACERDOTE y GUERRERO entre las gentes de la LEMURIA; todos le amaban, adoraban y veneraban.
Los HIEROFANTES de la Raza Purpúrea le concedieron el alto honor de usar coraza, cimera, casco, escudo y espada de oro puro.
Resplandecía aquel sacerdote guerrero como llama de oro bajo la selva espesa del sol.
En su simbólico escudo VULCANO había grabado muchas profecías y terribles advertencias.
¡Ay! ¡Ay! ¡Ay! Este hombre cometió el error de traicionar los MISTERIOS de VULCANO.
Los LUCIFERES de aquella edad que flotaban en la atmósfera del viejo continente MU, le enseñaron TANTRISMO NEGRO, MAITHUNA con eyaculación del ENS SEMINIS.
Lo más grave fue que este hombre tan amado y venerado por todo el mundo, se dejó convencer y practicó ese tipo pernicioso de MAGIA SEXUAL con distintas mujeres.
Entonces, es claro, descendió por el canal medular la serpiente ígnea de nuestros mágicos poderes y se proyectó hacia abajo desde el COXIS, formando y desarrollando en el CUERPO ASTRAL de YAHVÉ, el ABOMINABLE ÓRGANO KUNDARTIGUADOR.
Así cayó aquel ángel, se convirtió a través de todas las edades en un demonio terriblemente perverso.
En los MUNDOS SUPERIORES hemos encontrado muchas veces a la ESPOSA-SACERDOTISA de YAHVÉ, es un ángel inefable.
Inútiles fueron los esfuerzos de ese hombre por convencer a su esposa, ella jamás aceptó el TANTRISMO NEGRO de los tenebrosos y prefirió el divorcio antes que meterse por el camino negro.
YAHVÉ es aquel demonio que tentó a JESÚS el CRISTO y que tentándole en el desierto durante el ayuno le dijo: “Si eres el hijo de Dios, di a esta piedra que se convierta en pan”.
“No sólo de pan vive el hombre sino de toda palabra de Dios” respondió JESÚS.
Cuentan las sagradas escrituras que YAHVÉ llevó entonces a JESÚS el GRAN KABIR, a un alto monte y que tentándole le decía: “ITABABO, todos estos reinos del mundo te los daré si te arrodillas y me adoras”. El Gran Maestro respondió: “SATÁN, SATÁN, escrito está, al Señor tu Dios adorarás y a Él solo servirás”.
Y por último dicen que YAHVÉ llevó a JESÚS a Jerusalén y le puso sobre el pináculo del templo, y le dijo:
“Si eres hijo de Dios, échate de aquí abajo; porque escrito está: A sus Ángeles mandará cerca de ti, que te guarden; y en las manos te sostendrán para que no tropieces con tu pie en piedra”.
Respondiendo JESÚS, le dijo: “Dicho está: no tentarás al Señor tu Dios”. Y cuando YAHVÉ hubo acabado toda tentación se apartó de él por un tiempo.
Si queremos comprender a fondo todos los misterios de la RUNA KAUM, debemos hablar ahora sobre TANTRISMO BLANCO.
Me vienen en estos instantes a la memoria aquellos tiempos del antiguo Egipto.
Durante la dinastía del faraón Kefren, en el país asoleado de KEM fui un iniciado egipcio.
Una tarde cualquiera y llena de sol caminando por entre las arenas del desierto atravesé una calle de esfinges milenarias y me llegué a las puertas de una pirámide.
El guardián del templó, un hombre de rostro hierático y terrible, estaba en el umbral; en su diestra empuñaba amenazante la espada flamígera.
¿Qué deseas? Soy SUS (el suplicante o genuflexo) que vengo en busca de la luz.
¿Qué quieres? —respondí nuevamente—, luz.
¿Qué necesitas? Luz, —volví a responder—.
Jamás he podido olvidar aquel instante en que giró la pesada puerta de piedra sobre sus goznes produciendo ese sonido característico del Egipto faraónico, ese DO profundo.
El guardián me tomó por la mano bruscamente metiéndome en el templo. Se me despojó de la túnica y de todo objeto metálico, y se me sometió a terribles y espantosas pruebas.
En la prueba de fuego tuve que mantener un pleno control de mí mismo; fue terrible caminar entre vigas de acero encendidas al rojo vivo. En la prueba de agua estuve a punto de ser devorado por los cocodrilos del pozo profundo; en la prueba de aire pendiendo de una argolla sobre el fondo del abismo, resistí con heroísmo los huracanados vientos; en la prueba de tierra creí morir entre dos moles que amenazaban triturarme.
Ya había pasado por todas estas pruebas Iniciáticas en los antiguos tiempos, pero tenía que recapitular para retornar al camino recto, del cual me había apartado.
Se me vistió con la túnica de lino blanco y se me puso la cruz TAU sobre el pecho colgada al cuello.
Ingresé como cualquier neófito a pesar de ser un BODHISATTVA, tuve que pasar por rigurosos estudios y disciplinas esotéricas y cuando llegué a la novena puerta se me enseñaron los grandes misterios del sexo.
Aún recuerdo aquellos instantes en que mi GURÚ después de profundas explicaciones, mirándome fijamente me dijo con voz solemne: Descúbrete el CHECHERE (PHALO).
Entonces de labio a oído me comunicó el secreto indecible del GRAN ARCANO, conexión sexual del LINGAM-YONI sin eyaculación de ENS-SEMINIS.
Después trajo una vestal revestida con túnica amarilla y llena toda de extraordinaria belleza.
De acuerdo con las instrucciones de mi Maestro realicé con ella el trabajo, practiqué el MAITHUNA, TANTRISMO BLANCO.
Esta practica es maravillosa –dije- y bajé a la NOVENA ESFERA, así realicé la GRAN OBRA.
Objetivo, fabricar los cuerpos solares y despertar y desarrollar el fuego serpentino de la anatomía oculta.
Por aquella época existían prostitutas sagradas dentro de los templos, vestales especiales; con ellas trabajaban los INICIADOS célibes. Hoy en día tales mujeres metidas en los LUMISIALES, no convendrían, escandalizarían; por eso es que ahora el MAITHUNA, la SEXO YOGA solo se puede practicar y debe practicar entre esposo y esposa en hogares legítimamente constituidos.
En el antiguo EGIPTO de los FARAONES aquellos que violaban sus juramentos y divulgaban el GRAN ARCANO, eran condenados a pena de muerte; se les cortaba la cabeza, se les arrancaba el corazón, se incineraban sus cuerpos y por último sus cenizas, eran arrojadas a los cuatro vientos.
La misteriosa RUNA K representa con entera exactitud a la mujer sacerdotisa y también a la espada flamígera.
La RUNA KAUM con su kabalístico seis, vibra con suma intensidad dentro de la esfera de Venus, el planeta del amor.
Hombres y mujeres del mundo, sabed que sólo con el MAITHUNA es posible poner en actividad ese fuego serpentino anular en el cuerpo del asceta.
Necesitamos con urgencia inmediata aprender a manipular sabiamente el principio femenino eterno de las fuerzas solares.
Recordar el águila con cabeza de mujer, la dama sol, el fundamento diamantino de la GRAN OBRA del PADRE.
Primero debemos transmutar el plomo en oro y más tarde necesitamos fabricar diamantes de la mejor calidad.
La RUNA RITA influye decididamente sobre las glándulas endocrinas masculinas y la RUNA KAUM ejerce su influencia sobre las glándulas femeninas.
Existen por allí en el laberinto de todas las teorías muchos maromeros del HATHA YOGA.
Esos cirqueros suponen que pueden excluir el MAITHUNA y AUTORREALIZARSE a fondo sin necesidad de bajar a la NOVENA ESFERA.
Creen esos místicos de las maromas que a base de piruetas y gimnasias absurdas se pueden fabricar los cuerpos solares y llegar al nacimiento segundo.
Hace algún tiempo tuve el alto honor de ser invitado a un concilio secreto de la GRAN LOGIA BLANCA. Debo informar claramente al mundo que entonces fue descalificado el HATHA YOGA, reprobado, condenado como auténtica y legítima MAGIA NEGRA de la peor clase.
Los rectores esotéricos de la humanidad no aceptan, no aceptarán jamás las maromas absurdas del HATHA YOGA.
Quien de Verdad quiere AUTO-REALIZARSE a fondo, debe transmutar el HIDROGENO SEXUAL SI-12, por medio de la SEXO-YOGA para fabricar con él los cuerpos solares, el traje de bodas del alma.
Resulta absolutamente imposible encarnar en nosotros mismos a nuestro real ser si antes no fabricamos los cuerpos de oro en la FORJA DE LOS CÍCLOPES.
Es urgente, indispensable, necesario, caminar con firmeza por la senda del FILO DE LA NAVAJA.
Ha llegado la hora de seguir el camino del MATRIMONIO PERFECTO, recordad que nuestro lema divisa es THELEMA, voluntad.
Los misterios de la RUNA KAUM resplandecen gloriosamente en el fondo del ARCA aguardando el instante de ser realizados.
Samael Aun Weor
